18 de marzo de 2009

Enfermedades Tecnológicas


En este post veremos las “nuevas enfermedades” producidas por los aparatos electrónicos que la mayoría de las personas utilizamos a menudo. Una persona que utiliza el ordenador como herramienta de trabajo ejecuta entre 12.000 y 33.000 movimientos de cabeza y ojos, las pupilas reaccionan de cuatro mil a 17 mil veces y además se suelen ejecutar unas 30 mil pulsaciones de teclado. Y, aunque el computador no causa estas enfermedades, sí las motiva, por este motivo, el actuar de manera tan monótona y repetitiva influye en la forma de reaccionar del cuerpo, siendo un gran trabajo diario para el cuerpo ejecutar estas acciones.

La ergonomía que es la ciencia que estudia la optimización integral de sistemas hombre-máquina y la adaptación del ordenador a las capacidades y condiciones de quien lo usa.

Existe cierta discrepancia entre los expertos sobre si los trastornos oculares derivados de trabajar con ordenadores son sólo transitorios o se pueden convertir en patológicos. Lo cierto es que si existen miopías causadas por la lectura, también puede haberlas causadas por el ordenador. Al trabajar con pantallas de forma prolongada y habitual, algunas deficiencias oculares sin importancia se pueden convertir en lesiones más o menos graves. Por lo tanto, es recomendable hacerse revisiones oculares cada cierto tiempo.

Para evitar síntomas como escozor, parpadeo, visión borrosa, fatiga visual, se recomienda que los colores del monitor sean claros y mates, así se evitan reflejos; los caracteres tienen que estar bien definidos, con un buen nivel de contraste con respecto al fondo, de tamaño suficiente y con un espacio adecuado entre los renglones; la imagen de la pantalla ha de ser estable, sin destellos, reflejos, centelleos o reverberaciones.

Parece aconsejable un precalentamiento de la pantalla para evitar una posible fatiga visual producida por estas variaciones. También hay que tener un especial cuidado en que el filtro no oscurezca demasiado el monitor. Trabaje con monitores que lleven un tratamiento antirreflejo o incorporen un filtro especial; sitúe la pantalla a una distancia entre 50 y 60 centímetros. Nunca a menos de 40 centímetros. La parte superior de la pantalla debe estar a una altura similar a la de los ojos, o ligeramente más baja. El monitor se sitúa así en la zona óptima de visión, comprendida entre los cinco y los 35 grados por debajo de la horizontal visual, y desde la cual se contempla todo sin ningún esfuerzo. De esta forma, la vista no se resiente y se evitan posturas que lesionen la vista.

La pantalla ha de colocarse perpendicular a las ventanas. Nunca enfrente o de espaldas a ellas. En el primer caso, al levantar la vista, se pueden producir deslumbramientos. En el segundo, los reflejos de la luz natural sobre el cristal son inevitables.

Algunos ejercicios oculares pueden consistir en cerrar los ojos con la ayuda de las palmas de las manos, pero sin presionar. Otro es sentarse correctamente y mirar al frente. Después, sin mover la cabeza, desviar la mirada todo lo posible hacia la izquierda y luego a la derecha.

También es conveniente usar un atril para los documentos, colocándolo a una distancia equivalente a la pantalla y a su misma altura. De esta forma no se baja y se sube constantemente la cabeza para mirar y se reduce la fatiga visual. Siempre que pueda, use la luz natural; si no es posible encienda la luz del techo y la de la lámpara. Una luz fluorescente posibilita el descanso de la vista. Si se es zurdo, se recomienda una lámpara con luz a la derecha y si se es diestro, a la izquierda. Otra recomendación importante es hacer descansos de cinco minutos cada hora. Durante estas breves pausas hay que recrear la vista mirando escenas lejanas.

Los problemas que surgen por el uso, o mal uso del teclado no son distintos de los que han sufrido las secretarias de toda la vida. El teclado de los computadores es una herencia del que fue diseñado en el siglo pasado para las máquinas de escribir; teclas más suaves y otras adicionales son las principales diferencias.

Cada vez existen en el mercado más componentes que corrigen esto, como los teclados ergonómicos o los reposamuñecas. Tanto unos como otros permiten un acceso a las teclas en línea recta con respecto al
antebrazo, por lo que la postura que se adopta es más natural. El teclado ergonómico ofrece además un mejor ángulo de trabajo, teclas situadas donde los dedos tienen una posición de descanso. Son más costosos que los normales, pero vale la pena usarlos si se pasan muchas horas ante el computador.

Otros consejos con respecto al teclado es que sea mate o de colores claros, para evitar reflejos; independiente de la pantalla del computador, es decir, móvil, que permita adoptar una postura cómoda que no provoque cansancio; regulable en cuanto a inclinación, en un intervalo de 10 a 15 grados, con el fin de evitar movimientos forzados de las articulaciones, que pueden derivar en lesiones. Se recomienda que la línea media del teclado (tercera fila), no se levante más de tres centímetros de la superficie de trabajo.



¿Te gustó este post?, deja un comentario por favor, gracias.

1 comentario:

Anónimo dijo...

sta mortal este articulo.
es el mejor copmentario del mundo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!


yo la chiqui !!